Los regalos de los niños en Navidad

por | Dic 7, 2017 | BLOG, Familia, Psicología infantil | 0 Comentarios

Según a quién preguntemos, las Navidades pueden ser la época más maravillosa del año o uno de los periodos más estresantes. En estas fiestas, mientras los más pequeños se centran en disfrutar y se dejan llevar por la ilusión; los adultos, se tienen que encargar de innumerables responsabilidades: reuniones familiares, cenas de empresa, decoración navideña y los regalos. “Regalar a los niños de hoy es cada vez más difícil” dicen unos; “Los niños ya tienen de todo y nada les hace ilusión” afirman otros… Sea cuál sea tu caso, aquí te dejamos unos consejos para que este año la elección de los regalos sea más sencilla y éstos no se queden olvidados en el baúl desde el mismo instante que se abrió el envoltorio.

Escribiendo a los Reyes…

La carta a los Reyes Magos puede ser un espacio lleno de ilusión para reforzar algunos aprendizajes del colegio. Dependiendo de la edad del niño, podemos practicar la escritura y la caligrafía dedicando un rato a escribir una carta bonita. Si el niño es más pequeño, puede recortar del catálogo los juguetes que le gusten y pegarlos y trabajar, así, la psicomotricidad fina. Por último, en niños mayores, podemos pedirles que ayuden a los Reyes Magos y sumen el precio de todos los regalos que piden, así reforzar los conocimientos adquiridos en matemáticas. No olvidéis que los niños son fáciles de ilusionar, y si entiende que escribir la carta es un juego y os ven a vosotros ilusionados, ellos disfrutarán esforzándose un poco para lograr una carta más bonita o más “de mayor”.

En ocasiones, los niños pueden pedir muchas (demasiadas) cosas. Los padres y madres, desconcertados, ante el consumismo de sus pequeños no saben cómo reaccionar a esto. Para evitar estas situaciones, los adultos pueden limitar el número de regalos a pedir en la carta. De esta forma, enseñamos al peque que tiene que tomar decisiones él mismo; no pedir todo lo que le gusta, y que sean “Los Reyes” los que elijan por él.

La Navidad puede ser un buen momento para fomentar la solidaridad. El niño, puede incluir en la carta regalos para otras personas: “Este para papá…”, “Este para mamá…”, etc. Además, incluso dentro de los regalos que pida, puede elegir uno para regalar a los niños que no van a tener regalos. De esta forma, además de la solidaridad, ayudaremos al niño a aprender a renunciar y a frustrarse. Por último, esta época también es un buen momento para desprenderse de algunos juguetes que ya no utiliza. Algunas ONG recogen juguetes usados en estas fiestas. De esta manera fomentaremos la empatía en nuestros niños.

Escogiendo los regalos …

En ocasiones, aunque los padres y madres seamos capaces de acotar el número de regalos que hacer a nuestros hijos/as; otros familiares tienen dificultades para reducir el número de regalos. Podéis acordar entre todos los miembros de la familia, el número de regalos que recibirá el niño. Por ejemplo: “En casa del tío, tendrá uno; en casa de los abuelos, dos…”.

Elegid regalos seguros y adecuados a su edad. Debemos poner especial atención con los videojuegos, ya que muchos niños/as piden algunos que no son aptos para su edad. En cada juego y videojuego, aparece reflejado la edad recomendada, en caso de que no lo conozcamos y no sepamos si es apto.

Los regalos deben ser de acuerdo a los gustos de los niños. Esto que parece una obviedad, no lo es tanto. Es muy habitual, niños/as que no utilizan los regalos más allá del día de Reyes. Generalmente, los adultos solemos pensar que es por la gran cantidad de juguetes que tiene. Sin embargo, muchas veces los adultos elegimos los regalos en función de lo que a nosotros nos gustaría que le gustase al niño. Así el padre apasionado de la bicicleta, le regala una a su hija; el abuelo fanático del bricolaje, le regala una caja de herramientas a sus nietos; y el tío entusiasta de la repostería, le regala un kit para hacer cupcakes a su sobrino. Quizá estos niños preferían un sencillo puzle, y es probable que los regalos que sus familiares le han regalado con tanta ilusión, se queden cogiendo polvo en un cajón.

Y… ¡lo más importante! No olvidéis que el mejor regalo para nuestro hijo es el tiempo que pasamos con ellos. Tened esto en mente cuando elijáis un regalo. Y elegiréis obsequios, adecuados a sus gustos, que impliquen hacer actividades juntos: una construcción, manualidades, juegos de mesa, etc.

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